viernes, 6 de enero de 2012

ADIOS

Bueno chicos, hoy me despido de todos vosotros en este mundo. Galindo ya no existe, es una ilusión y una cosa que ayer dejó de ser, estar y parecer. Ayer he enfrentado una de las mayores luchas de mi vida y lo mejor de todo es que ahora me siento libre. Antes no era yo estaba hinchado de un montón de falsedades, gilipoyeces y cabronadas que en su mayoría ayer ya solté. Me jode haber dicho las cosas como las dije, pero me fui para la cama super tranquilo, con la conciencia limpia de haber dicho lo que sentía y lo que me parecía y que había callado durante muchos meses, semanas y días. Estaba viviendo una falsedad y una farsa. 

Yo soy de una manera de ser chicos y hay cosas en mí que nunca cambiarán. Yo no fui con vosotros buscando amigos sino buscando una labor pastoral que llevar a cabo y un apostolado que realizar desde la fe y desde la oración. Si fuese buscando amigos, jamás hubiera actuado como lo he hecho. 

He estado con vosotros con un objetivo y un mandato único y último: me da igual lo que las personas digan de mí o dejen de decir yo vengo a llevar a cabo una labor que es unir al grupo y si para eso tengo que separar a personas las separó y si las tengo que unir las uno. Me meto en las relaciones si, para que no pase lo que me pasó a mí y es que después de estar tres o cuatro meses detrás de una chica llevándola al cine, dándole clases particulares de contabilidad... me digan que no quiere nada conmigo y que el pico que me había dado era una puta y asquerosa apuesta. Desde ese momento, me prometí a mi mismo que me iba a meter donde hiciera falta para que ninguna mujer ni ningún hombre se riera de la otra persona. 

Vosotros y este grupo ha sido pilar fundamental de mi vida en este último año y se me he callado las cosas y si las he dejado pasar es por no montar bulla. Prefiero joderme yo y recomerme viendo que hay cosas que el puro y simple sentido común humano dicen y que nosotros no hemos hecho, con tal de no discutir y de que no haya problemas. Os lo dije entonces y lo digo ahora prefiero una falsa felicidad a una verdadera angustia. Para lo segundo, ya tengo mi propia vida no hace falta que vosotros me lo recordéis. Si para mí una cosa es BLANCA lo es y punto y lo defenderé hasta el infinito y más allá, por mucho que la mayoría apruebe que sea NEGRA. 

De que me sirve dar la cara y decir las cosas: Para nada. Digo en un momento dado que no me gusta esto o aquello y que no se debe hacer así o asá y llega el siguiente día y se sigue haciendo igual que antes. Para mí, la implicación de una persona, su responsabilidad y su aceptación quiere decir que todo los movimientos que se den deben pasar por la previa consulta de todos y cada uno de los miembros del grupo y si no están se les llama y se les pregunta. De no hacerlo, yo considero que pasáis de mí o de esas personas y que os importa un comino su vida y su persona. En el colegio y en otros ámbitos de mi vida, se dicen y se hacen cosas sin yo dar mi opinión o mi consentimiento. En esos casos, yo me considero una mierda y menos que el resto de la gente. Si algo es de todos, ese todos es el que debe hablar. 

Pero ahora ya da igual. Ya todo esta hecho. La suerte se ha jugado y ha perdido. Yo soy, he sido y seré el malo de la película. Ahora tendréis que contratar a otro y mientras tanto cada vez sois menos los que quedan. Yo vine a realizar una función y creo que la he cumplido y el resto me da igual. 

Hasta siempre. 





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